
SENTIR
Durante 25 años los miré, los retraté, los capturé, para guardarlos para siempre. Migrar y mantener relaciones cercanas parecían ser dos conceptos incompatibles. Pero resultaron no serlo.
Los veo colgados de mis paredes y escucho sus voces grabadas, nuestras conversaciones. Y de repente el idioma, lo que dicen, ya no importa. No importa si me miran. No importa si ya no están aquí.
Se trata de esa sensación que tienes cuando cierras los ojos y ya no los ves, los sientes.
SIENTO
Cuando abro los ojos los retrato, cuando cierro los ojos los escucho. Durante 25 años los miré, los retraté, los capturé para quedármelos para siempre. Emigrar y mantener relaciones estrechas parecían dos conceptos incompatibles. Pero resultaron no serlos. Los observo colgados en mis paredes y escucho sus voces grabadas, nuestras conversaciones. Y de repente no importa el idioma o lo que dicen. No importa si me miran. No importa si ya no están. Es sobre esa sensación que te da cuando cierras los ojos y ya no los ves, los sentís. Cuando los cierro, escucho.